Ya hace más de un mes que comenzó el confinamiento y todo apunta a que pasarán unas cuantas semanas más, si no meses hasta que recuperemos la normalidad absoluta. Este cambio de situación provocado por el estado de alarma da lugar a cambios en la rutina de nuestros peludos a los que debemos estar atentos para no descuidar su salud.
La restricción en los paseos repercute directamente en un descenso de su actividad física, sumado al número de horas que pasan en casa hace evidente que también debemos reestructurar sus hábitos de alimentación.
En casa ya hemos adoptado nuevas pautas de alimentación con Hulk y Django que me gustaría compartir con vosotros por si os sirviera de ayuda.
Está claro que la operación bikini de este año se ha ido al traste debido a las restricciones en los paseos, las excursiones, actividades de fin de semana… todos, incluso nosotros nos tenemos que controlar o acabaremos rodando en lugar de caminar. Por eso es importante que tomemos medidas a la hora de llevar un control del peso, sabemos que es muy fácil ganarlo pero muy difícil perderlo…
Parece que la reducción o incluso eliminar el uso de Snacks o premios, por muy naturales que sean, deba ser la solución, pero aunque es cierto que son un extra en su dieta y pueden hacerles ganar peso hay más medidas que podemos adoptar y que son tanto o más efectivas que esta.
Así pues, la manera más sencilla de evitar un sobrepeso ahora que su actividad diaria se ha reducido es disminuir un 10% la ración diaria. A menor actividad física menores serán sus necesidades alimentarias.
Os recomendaría que si tenéis la posibilidad de pesar a vuestro amigo lo hagáis, de esta forma podéis llevar un control más exhaustivo de su peso y aumentar o reducir la dosis según su estado. Y en caso de duda siempre consultadlo con vuestro veterinario a través de una llamada.
Hay muchos peludos que tienen por costumbre pedir comida cuando nosotros comemos o cenamos y también hay muchos humanos que no pueden resistirse a esos ojitos tristones y esos hocicos húmedos y terminan por darles algo de picar.
También es posible que aprovechemos este confinamiento para hacer que aprendan nuevos trucos como dar la patita, encender y apagar luces, bailes…
El uso de juguetes interactivos, de inteligencia para que estén entretenidos como las mantas olfativas, o esconder comida por la casa para que se entretenga y ejercite a través del ejercicio del olfateo…
El ejercitar sus mentes y sus cuerpos es bueníiiiiiiisimo, lo recomiendo al 200%, pero hay que tener cuidado con los premios que utilizamos para ello.
Recordar que la cantidad recomendada diaria no debe superar el 10% y deberá ser descontada de la ración diaria
Así pues os comento como lo hacemos en casa:
Al igual que para los humanos, la distribución de alimentos no se ha detenido pero sí que se ha visto afectada o modificada en los tiempos de espera. Así pues debemos ser previsores y más aun si nuestro peludo necesita de una alimentación específica por intolerancias, enfermedad crónica o alguna dolencia.
Si podemos evitarlo es mejor no introducir alimentos nuevos o un cambio de pienso durante el período de confinamiento, ya que en algunos casos pueden causar diarreas y/o malestar digestivo pero, si nos vemos forzados a hacerlo por el motivo que sea, siempre, siempre debe ser de forma progresiva en un plazo mínimo de 4 días mezclándolo con su alimento habitual.
Con estos consejos, con mucho ánimo, salud y energía ya veréis como este confinamiento nos hace salir a todos mucho más fuertes y preparados para ese maravilloso futuro que nos espera cuando salgamos de casa. Y no quería despedirme de vosotros sin enviaros un abrazo enorme y deciros que todo saldrá bien.