Siempre que aparece algún bulto en la piel de Uma, me asusto.
La primera vez que le noté un bulto enorme fue en su primera vacunación. La veterinaria me calmó diciéndome que era algo normal y una simple reacción a la vacuna sin más.
Con el pasar de los días ese bulto desapareció.
Hace unas semanas, acairicando a Uma noté varios bultos en su muslo y en la espalda, así que no me lo pensé y enseguida pedí cita con la veterinaria.
Tras observar los bultos, volvió a tranquilizarme y me comentó que eran bultos que se creaban debido a la alergia por dermatitis que tenía Uma.
A día de hoy que la alergia está más controlada, los bultos han desaparecido.
Sin embargo, ante cualquier bulto, no debes dudar en acudir inmediatamente al veterinario, porque puede que no sea nada, como en el caso de Uma, o pueden ser bultos muy peligrosos.
Por ejemplo, hay bultos que, si no se atienden a tiempo, pueden transformarse en tumores cancerígenos inoperables.
En los perros, es muy común esta enfermedad, sobre todo si los adoptantes no toman las medidas adecuadas para el cuidado de la piel de sus perros y de su salud en general.
Existen muchos bultos o tumores que pueden originarse en el cuerpo de los perros.
Muchos de ellos son curables con tratamientos, otros se quitan con compresas calientes que disminuyen la inflamación, pero otros, pueden llegar a ser inoperables.
Es por ese motivo que, el adoptante, debe estar alerta y pendiente del comportamiento de su perro y de su piel, para detectar algo extraño a tiempo.
Son muchas las causas que pueden originar el crecimiento de un bulto en la piel de los perros y que se vaya desarrollando de forma maligna hasta convertirse en tumor.
Las principales causas que pueden generar bultos en las mascotas, son:
Existen muchos tipos de bultos que pueden aparecer en la piel de un perro.
Cada bulto tiene sus riesgos y consecuencias, pero pueden tratarse dependiendo de qué tan avanzado esté.
Son muchos los que existen, pero los más comunes, son los siguientes:
Así como existen diferentes tipos de bultos en la piel de los perros, hay bultos que se convierten en tumores malignos.
Esos tumores hacen que la vida del perro esté en riesgo, de ahí la importancia de actuar rápido con la ayuda del médico veterinario ante cualquier mínima sospecha.
Algunos de los tumores malignos que se pueden desarrollar en la piel de los perros, son:
Si se detecta un tumor en la piel de un perro, lo más recomendable es llevarlo a una consulta con el veterinario.
El adoptante, debe estar atento a las preguntas que el médico le realice para conocer el estado de salud del perro.
Una vez que el médico conoce los antecedentes del perro, le realizará un examen cuidadoso.
Con ese examen, se podrá determinar qué tan grave presenta la anomalía y qué tratamiento es el adecuado para su recuperación.
Los bultos de origen tumoral son los más comunes en los perros de edad avanzada, debido a que la edad, es un punto vulnerable para ellos.
Pueden aparecer bultos en los párpados, donde se encuentran las glándulas de meibomio, que tienen como finalidad proteger la córnea de riesgos externos.
Esos bultos no son peligrosos, pero al interferir con la córnea, pueden llegar a causar irritación en ella.
Sin duda alguna, eso conlleva a que el perro tenga algunas molestias.
Existen muchos tratamientos para combatir los bultos o tumores que pueda padecer un perro.
Ese tratamiento dependerá del tipo de bulto que el perro tenga y qué tan avanzado sea.
Si se trata de un absceso en cualquier parte del cuerpo, todo dependerá de lo que indique el veterinario.
En estos casos, seguramente hay que proceder a desinfectar o suministrar algún medicamento para disminuir la inflamación.
Importante:
Es importante tener un cuidado especial cuando los perros presentan algún bulto o absceso en la parte del cuello o la cabeza, porque si se deja avanzar, puede ser muy peligroso y convertirse en algo cancerígeno y, de ser así, sería algo más difícil de tratar.
Es por ello que el perro debe recibir una atención inmediata al momento de detectar algún bulto en su cuerpo, por pequeño que sea.
No debemos olvidar que muchos bultos en la piel de los perros pueden originarse por alguna vacuna.
No obstante, la mayoría desaparecen solos con el paso de pocos días.
Pero muchas veces pueden convertirse en un absceso.
Si ocurre de esa manera, sería una alarma importante que ningún adoptante debe pasar por alto y llevar al perro al veterinario lo más pronto posible.
También existen remedios caseros que pueden ayudar a disminuir los bultos originados por alguna vacuna o si se trata de un absceso.
En estos casos, se pueden usar compresas calientes para colocarlas sobre el bulto que el perro tenga.
Esto se debe hacer unos 15 o 20 minutos 4 veces al día.
De esta manera, poco a poco, se irá ablandando el bulto permitiendo que sea mucho más fácil de sacarlo.
Por otro lado, existen bultos malignos y, dependiendo de la localización que se encuentren en el cuerpo del perro, no requieren de ningún tratamiento.
Los bultos malignos pueden crecer más y ser un poco molestos.
Si llega a ese punto, es necesario que se lleve a cabo extracción.
Por supuesto, siempre contando con el diagnóstico y aprobación del veterinario en todo momento.
Además de existir bultos o abscesos no tan peligrosos, existen otros que llegan al límite de ser cancerígenos.
En estos casos, se recomienda acudir a un profesional, para que le realice la evaluación y diagnóstico adecuado.
Así, el veterinario, podrá conocer más a fondo la salud del perro y saber si es necesario operarlo o no.
Nota importante:
Es importante mencionar que hay muchos casos que no pueden ser operados, esto debido al riesgo que puede haber en la intervención.
Aunque pueden existir casos inoperables, hay otros que pueden ser tratados con radioterapia o quimioterapia.
Todo depende de la salud del perro y qué tan avanzada se encuentre su enfermedad.
La piel es la primera barrera protectora que tienen los perros para protegerse de cualquier amenaza o enfermedad.
Aunque es algo muy importante, muchas veces no se le da la importancia necesaria.
Hoy en día existen muchas bacterias y parásitos en el ambiente que pueden afectar la vida y salud de los perro, pero también al cuidar su piel será mucho más fácil detectar la presencia de cualquier anomalía, así como los bultos u abscesos.
Mantener la salud y fortaleza en la piel de los perros es muy importante porque actúa como parte de barrera contra ciertas infecciones.
La epidermis del perro es su primer escudo protector ante cualquier enfermedad.
La epidermis se conoce por ser flexible, cubierta por su pelo y cumple la función de ser una barrera protectora en el perro.
La epidermis los protege del ambiente (ya sea de un clima frío o caliente) y de cualquier otra bacteria externa.
Algunas recomendaciones importantes para detectar cualquier anomalía en la piel del perro, son:
Cuidar la piel de un perro es tan importante como su salud.
La piel permite que fluya su respiración y transpiración de una manera adecuada.
Mantenerla sana y correctamente hidratada, hará que el perro no sufra ninguna enfermedad en la piel como los bultos o tumores mencionados anteriormente.
Los consejos más recomendados por los veterinarios y especialistas en el cuidado de la piel de los perros, son:
Es importante que el adoptante siempre esté atento a diferentes síntomas que el perro manifieste, o si observa o siente algo extraño en la piel de su mascota.
De igual manera, es muy importante cuidar la alimentación y la hidratación del perro.
Llevarlo al veterinario cada cierto tiempo para realizarle su evaluación rutinaria, ayudarán a mantener informado al adoptante sobre el estado de salud de su perro.
De esta manera, son más las probabilidades de conocer si existe algún síntoma de alguna enfermedad, si existe algún cambio en su cuerpo, su piel, alguna anomalía y detectarla a tiempo para combatirla y que tu mascota no corra ningún riesgo.
El cuidado de las mascotas es responsabilidad del adoptante y por ello es necesario estar atentos para que nada malo les ocurra.
Prevenir es la mejor manera de mantener al perro sano y feliz.